El amor...
algunas veces duele,
aunque siempre sana
porque de todo se aprende.
No
es fácil encontrar el amor
e
incluso cuando lo has logrado,
si
no vas con cuidado,
se
te escapa entre los dedos
en
cuestión de segundos,
como
agua de mar.
Nada
puede retener el amor,
y
al mismo tiempo,
el
amor es lo único que perdura.
Cometemos
errores pero no fracasamos,
nunca
desistimos y siempre lo intentamos.
En
el amor, todo nutre, todo queda.
Brindemos
pues por el amor!
Y
aprendamos la lección.
El
amor es como ese palo afilado
que
clavas en tierra seca
y
giras y giras enérgicamente
hasta
que se produce la llama.
El
amor es como el vapor de agua
que
se condensa y coge forma.
Cae al vacío siendo gota,
choca
contra el asfalto
y
desaparece al fundirse en él.
El
amor es ese rayo de sol
que nace de una ardiente esfera
para
atravesar tu ventana
e
inundar, así, tu habitación.
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